Camine unos doscientos metros para encontrar un taxi o en su caso, el me viera e hiciera su parada para ganar unos cuantos pesos.
Un atos como ya es bien sabido, tal vez y hasta costumbre, ya que abundan por las calles de Torreon Coahuila.
Recuerdo que hacia un calor insoportable y el maldito sol quemaba mis entrañas y mi paciencia. Un joven de aproximadamente unos veinticinco o veintiséis años, unos botonones de piel de cocodrilo y a los costados exotica piel de avestruz. La radio encendida y se escuchaba la cadena de radio popular de la laguna "La Caliente 92.3" con la"Hora De Los Enamorados" Llamadas de mujeres locas de pasión, pidiendo a gritos el sabor del sexo y la fragancia de un hombre de buenos sentimientos para que estuvieran a su lado.
Casualidad de la platica que se venia cocinando con buen sazón en la radio, el taxista me empezó a platicar de su morrita. Relata su historia de como la vida los junto y como los volvió a rejuntar mas sabroso.
Pero viene lo malo del asunto, tenia que dedicarle tiempo a mi morra, y pues de que la recogia de su trabajo y nos íbamos a ver películas y echar un palito, y pues ahí estábamos encueradotes en la casa de la abuelita viendo películas, ahí en el cuarto acostados, y pues la abuelita como esta sorda ya no sale del cuarto así que no oye los gemidos de mi morra así que a toda madre, no cabron no te miento tiene unas tetas y un culo pero rico rico, sabroso, ni me la creo que ando con ella, pero pues medio día aya con ella perdía mucha clientela.
Y a veces como ya no le cobro nada del viaje me deja cincuenta pesos a la sorda, pero después se los regreso, le digo no mija tengo esto es suyo, me dice ay no no quedatelo mijo. Pero pues ya tengo rato que no la veo, a veces paso por su trabajo (Joyería en el centro de Torreón Coahuila) y le pito y la saludo, y ahí andan unos batos sobres de ella pero se la pelan por que ella me quiere a mi.
Cambiamos de tema, a su taxi hablando de el; es de mi jefe, pero pues yo pago tenencia y placas y lo que saque es para mi todo, pues a toda madre, como quiera ya saco algo. Antes traía sonido pero como pague la tenencia lo tuve que vender pero ahí tengo otro amplificador que al rato se lo pongo para que se escuche machin. En eso se detuvo el taxi, si ya había llegado a mi destino.
Un atos como ya es bien sabido, tal vez y hasta costumbre, ya que abundan por las calles de Torreon Coahuila.
Recuerdo que hacia un calor insoportable y el maldito sol quemaba mis entrañas y mi paciencia. Un joven de aproximadamente unos veinticinco o veintiséis años, unos botonones de piel de cocodrilo y a los costados exotica piel de avestruz. La radio encendida y se escuchaba la cadena de radio popular de la laguna "La Caliente 92.3" con la"Hora De Los Enamorados" Llamadas de mujeres locas de pasión, pidiendo a gritos el sabor del sexo y la fragancia de un hombre de buenos sentimientos para que estuvieran a su lado.
Casualidad de la platica que se venia cocinando con buen sazón en la radio, el taxista me empezó a platicar de su morrita. Relata su historia de como la vida los junto y como los volvió a rejuntar mas sabroso.
Me dice: mira aquí andando de taxista la conocí, eran ya las nueve de la noche cuando andaba por el centro, una guerita me hace la parada y me detengo, y ya me da su dirección a la cual la voy a llevar, era haya en San Pedro, y ya nos fuimos e íbamos platicando de su trabajo en plan de cotorreo todo tranquilo, llegamos y me dijo que si mañana pasaba y la recogía en el mismo lugar a la misma hora, trato hecho señorita. Al otro día se repitió lo mismo, y yo de buena gente le cobraba un poco menos por ser guapa y atractiva en pocas palabras esta bien buena. Paso una semana repitiendose el mismo viaje, hasta que un día me arme de valor y le dije: Oiga mija le voy a decir una cosa, pero quiero que sepa que todo con respeto y no se me vaya a asustar, pero mire la cosa es esto, usted me gusta mucho y pues yo quisiera ser su novio no se usted que opine, ella tiernamente y tal vez un poco desatendida de la vida, me contesto que le diera tiempo para aceptar o rechazar la propuesta. Otra semana de tiempo el viaje seguía en cotorreo, la vida, el cielo, las estrellas y la música. Pasaron los días y ella no me decía nada así que a la semana le digo, entonces que mija que dice a lo que le dije que quería que usted fuera mi novia. Ella me dice pues sabe que, pues si vengase mijo vamos a intentarlo al cabo que que tiene. Pues que me alegro todo, era un viejonon, guerita, delgadita, alta, preciosa chula la condenada.
Pero viene lo malo del asunto, tenia que dedicarle tiempo a mi morra, y pues de que la recogia de su trabajo y nos íbamos a ver películas y echar un palito, y pues ahí estábamos encueradotes en la casa de la abuelita viendo películas, ahí en el cuarto acostados, y pues la abuelita como esta sorda ya no sale del cuarto así que no oye los gemidos de mi morra así que a toda madre, no cabron no te miento tiene unas tetas y un culo pero rico rico, sabroso, ni me la creo que ando con ella, pero pues medio día aya con ella perdía mucha clientela.
-perdón, momento donde el escritor se esta tomando una cerveza y tiene que parar de escribir un momento-
Y a veces como ya no le cobro nada del viaje me deja cincuenta pesos a la sorda, pero después se los regreso, le digo no mija tengo esto es suyo, me dice ay no no quedatelo mijo. Pero pues ya tengo rato que no la veo, a veces paso por su trabajo (Joyería en el centro de Torreón Coahuila) y le pito y la saludo, y ahí andan unos batos sobres de ella pero se la pelan por que ella me quiere a mi.
Cambiamos de tema, a su taxi hablando de el; es de mi jefe, pero pues yo pago tenencia y placas y lo que saque es para mi todo, pues a toda madre, como quiera ya saco algo. Antes traía sonido pero como pague la tenencia lo tuve que vender pero ahí tengo otro amplificador que al rato se lo pongo para que se escuche machin. En eso se detuvo el taxi, si ya había llegado a mi destino.
1 comentario:
cherryson we
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